Hoy cierra las puertas uno de los más emblemáticos lugares de la moda, del underground, y máximo punto de encuentro para gente que apostaba por la modernidad y las nuevas tendencias en los 90 en Madrid. Hablamos del
Mercado de Fuencarral, uno de los lugares más singulares que aparecieron en aquella época y del que hoy nos queremos despedir desde
AuRevoir Cinderella.
Para nosotros es un lugar muy especial por todo lo que representa, pues fue uno de los primeros lugares en acercarnos marcas que de otra manera no se podían encontrar, sin viajar a Londres, EEUU o París, claro. Toda una inspiración, y un lugar icónico en la capital.
Desde su inauguración, este multiespacio dio cobijo a todo tipo de jóvenes, y no tan jóvenes, que marcaban la diferencia. Conseguía aglutinar a skaters, hippies, góticos, rockers, y todo lo que puedas imaginar. Sus 50 establecimientos simbolizaban tendencia, atrevimiento y alternativa, y entre ellos podías encontrar una peluquería, calzado, sala de exposiciones, complementos, música, moda, tatuajes, sesiones de dj´s continuas, cine, o performance.
Este centro comercial de 3 plantas despertó la zona, y abrió las miras y las posibilidades para que otras marcas minoritarias abrieran a su alrededor locales, de los cuales la mayoría han sido sustituidos por grandes marcas. El
Mercado de Fuencarral se despide hoy, pasando de ser el templo de la modernidad a lo que seguramente sea una tienda convencional.
Desde ARC nos sumamos a esta despedida cariñosa, y le mandamos un gran
Gracias a este espacio emblemático por haber existido y mostrarnos su universo, y no haber sido solo ese lugar donde podíamos ir a buscar flyers para las mejores fiestas de la ciudad en una época. Ni solamente por mostrarnos esos anillos de plástico y mochilas entachueladas hasta la médula. Por dar cabida a marcas poco accesibles, nacionales e internacionales.
No solo por ser cabeza visible de cultura en el centro de Madrid. Si no también por todos esos buenos momentos, por haber marcado la diferencia, por haber conseguido ser lo que otros no serán nunca. Hasta pronto.